Vox escenifica la ruptura con Ayuso: no garantiza el apoyo a ninguna ley antes de las elecciones

Las relaciones entre Vox y PP en la Comunidad de Madrid están en punto muerto desde el pasado 30 de noviembre, cuando la negociación para aprobar los Presupuestos autonómicos de 2023 saltó por los aires. Desde entonces, ninguna de las dos formaciones ha vuelto a tener contacto y el distanciamiento es tal que Vox no sólo no garantiza su apoyo a las leyes pendientes de aprobación en la presente legislatura, sino que la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, y la líder de Vox en Madrid, Rocío Monasterio, ni se saludan a día de hoy.

Aunque apenas las separaban unos pocos metros en la primera fila del acto de recuerdo del Holocausto que se ha celebrado este martes en la Asamblea de Madrid, ninguna de las dos se ha dirigido la palabra al término de un evento en el que los presentes se han quedado un buen rato charlando entre ellos en los habituales corrillos que se forman en este tipo de encuentros.

Así pues, se trataría de la escenificación de una ruptura que parece no tener vuelta atrás, toda vez el PP se ha negado a volver a negociar las cuentas con Vox -aduciendo que ya no queda tiempo en los apenas 4 meses que quedan de mandato antes de las elecciones-, después de que los de Rocío Monasterio les acusaran de «humillación» en la primera negociación, registraran tarde sus enmiendas al texto y finalmente tumbara el dictamen que impidió la celebración del Pleno de debate de los Presupuestos.

Con todo, desde el Gobierno de Díaz Ayuso aún confiaban en recabar el apoyo de Vox para las quince leyes que quiere aprobar antes de la cita con las urnas, entre las que se incluyen rebajas del IRPF y ayudas a la maternidad. Sin embargo, desde Vox, no aseguran que vayan a apoyar todas las iniciativas.

Algunas ya están negociadas, según ha avanzado Monasterio, pero otras no y habrá que ir viéndolas «partido a partido». «Hay que sudar la camiseta», ha apostillado la dirigente en un símil futbolístico en el que deja entrever que su grupo parlamentario no tiene intención de apoyar esas leyes sin una ardua negociación previa.

Por su parte, desde el grupo parlamentario popular consideran «irresponsable» la actitud adoptada por Vox al no aprobar los Presupuestos. «Humillación deben sentir los votantes de Vox porque su formación presenta sus enmiendas fuera de plazo y que además las presente mal porque la inmensa mayoría tampoco se hubiesen tramitado porque estaban mal hechas», ha lanzado el portavoz del PP en la Asamblea, Pedro Muñoz Abrines.

Abrines ha mostrado su «absoluto convencimiento» porque, a pesar de la evidente tensión que atraviesan ambos partidos, las iniciativas legislativas en tramitación sí salgan adelante «porque Vox presentó en plazo sus enmiendas y podremos llegar a un acuerdo». A no ser, ha advertido, que «intencionadamente no se quiera visualizar ese escenario».